Cómo protegerte del sol todo el año

¿Alguna vez has sentido la necesidad de dar un paseo al ver que ha salido el sol? ¿De ir al parque a leer porque hace un día buenísimo? ¿De comer en una terracita y aprovechar el buen tiempo?
El sol es una fuente de energía que nos aporta numerosos beneficios, pero si abusamos de él sin tomar precauciones puede ser perjudicial para nuestra salud. Es importante que conozcamos sus efectos tanto positivos como negativos, para así sacarle el máximo partido y disfrutar de esta fuente de vida:

Ventajas	Perjuicios
Nos ayuda a producir vitamina D.	Puede provocar cáncer de piel.
Fortalece nuestro sistema óseo.	Acelera el envejecimiento de la piel.
Equilibra el colesterol.	Puede provocar manchas y quemaduras en la piel.
Disminuye la presión sanguínea.
Mejora el aspecto de nuestra piel.
Ahuyenta la depresión.
Nos protege frente a determinadas enfermedades.
Mejora la calidad del sueño.

Los rayos solares ultravioletas, llamados UVA y UVB, penetran en la piel y son los que provocan ese bronceado que tanto nos gusta y favorece, pero también manchas, quemaduras y otros efectos negativos para nuestro organismo. Por eso la importancia de protegerse siempre utilizando productos con FPS (factor de protección solar) de amplio espectro, esto quiere decir que el número que acompaña a las siglas sea siempre 30 o superior.

¿Sabes cómo elegir el protector solar?

Si alguna vez te han surgido dudas y no sabes cuál es el adecuado para ti, piensa lo siguiente: el número que aparece en el envase del producto indica el tiempo que tu piel está protegida frente al sol, es decir, si tu piel tarda en enrojecerse 10 minutos, con la Pantalla Solar FPS 30 Mary Kay® tardaría 10×30= 300 minutos, tu piel estaría protegida durante unas 5 horas, pero aún así, es importante reaplicar el producto cada dos horas aproximadamente ya que durante ese tiempo podemos sudar, tocarnos la piel, bañarnos… y poco a poco vamos eliminando esa protección y nuestra piel vuelve a estar vulnerable.

Ahora te preguntarás, ¿entonces en invierno no hace falta que use un protector tan alto o sí? En las estaciones más frías del año los rayos UVB no tiene tanta intensidad y no sentimos esa sensación de quemazón pero aun así los rayos UVA persisten y contribuyen a la aparición de manchas o cáncer del piel. Con productos de un FPS 15 o superior protegerás la piel de estos efectos y además estará más cuidada, hidratada y suave. Una opción muy cómoda y práctica es incorporar a tu rutina diaria una hidratante para tu tipo de piel con factor de protección solar.

Consejos para un bronceado seguro todo el año

Nuestra piel actúa como un reloj que va acumulando todas esas horas de sol, independientemente de la estación del año que sea. Sigue estas pequeñas pautas para que tu exposición al sol sea lo más saludable posible:

• Utiliza gafas de sol. La piel de esta zona es la más fina y delicada del rostro, por lo que es muy importante prestarle una especial atención.
• Di sí a los sombreros, gorras o viseras. Protegerán tu cuero cabelludo, orejas, nuca…
• Limita tu exposición solar: intenta sobre todo en los meses de verano no exponerte en las horas centrales del día, cuando los rayos solares inciden de manera más intensa en nuestra piel.
• La arena, el aire, el agua o el cristal no bloquean los rayos solares. En ocasiones puede darte la sensación de que no te estás quemando pero los efectos nocivos siguen siendo exactamente los mismo, así que protégete aun en esas situaciones.
• Hidrátate, sobre todo en los meses de más calor. Conoces la importancia para nuestra piel y nuestro organismo de beber al menos 2 litros de agua al día, ¡así que no lo descuides!

¡Incorpora el protector solar a tu rutina diaria de cuidado de la piel y disfruta del sol con una piel sana y sin riesgos!