Elegir el maquillaje adecuado para tu tipo de piel puede ser complicado. Aquí tienes una guía fácil con algunos trucos para seleccionar los productos de maquillaje y técnicas de aplicación ideales.
No existe una rutina única para el cuidado de la piel y lo mismo ocurre con el maquillaje. Los diferentes tipos de piel requieren distintas técnicas de aplicación de maquillaje, así como productos y fórmulas. Ya sea grasa, seca o una combinación de ambas, educarte sobre el maquillaje adecuado puede marcar la diferencia.
Si tienes piel grasa, se recomienda utilizar productos ligeros, sin aceite y no comedogénicos, que no obstruyan los poros. No olvides realizar una doble limpieza en tu rostro antes de aplicar cualquier producto.
Es común tener poros abiertos visibles con la piel grasa. Por lo tanto, un primer difuminador de poros es perfecto para este tipo de piel. Además, opta por una base de acabado mate o una crema hidratante con color de efecto matificante. Fija tu base con un polvo suelto o compacto para ayudar a que tu maquillaje se mantenga intacto. Utiliza papel secante para controlar el exceso de grasa a lo largo del día.
Piel seca
Para la piel seca, elige una base de acabado luminoso o satinado, o una crema hidratante con color que hidrate y nutra la piel. Evita las bases etiquetadas como mate o de acabado en polvo, y aléjate de los productos en polvo, ya que pueden acentuar la sequedad, o úsalos solo en cantidades limitadas. Termina tu maquillaje con un fijador hidratante para un acabado luminoso.
Piel mixta
Si tienes piel mixta con zona T grasa y mejillas secas, elige productos sin aceite y ligeros para la zona T y productos hidratantes para las mejillas. De manera similar, opta por una base de acabado mate para la zona T y una base hidratante para las mejillas.
Aplica una crema hidratante a base de agua antes del maquillaje, seguida de un primer matificante para estar más segura. Fija tu maquillaje con un polvo translúcido, ya que es más ligero y no hará que tu maquillaje se vea pastoso. Si tu piel se ve grasosa y brillante al final del día, opta por menos iluminador. Si tienes mejillas secas, opta por un iluminador líquido. Termina tu maquillaje con un fijador mate.
Piel sensible
Si tienes piel sensible, busca etiquetas como sin fragancia, hipoalergénico, no irritante y antiinflamatorio en tus productos. Opta por maquillaje a base de minerales, ya que estas formulaciones generalmente no contienen químicos agresivos ni irritantes, como colorantes y aditivos.
Utiliza bálsamos limpiadores naturales para retirar tu maquillaje en lugar de toallitas para evitar irritaciones en la piel. Evita demasiados ingredientes activos en tu cuidado de la piel.
Piel propensa al acné
Si tienes piel propensa al acné, utiliza productos no comedogénicos que no obstruyan los poros y eviten agravar aún más tu acné. Si tienes piel escamosa alrededor de las áreas de acné no activo, usa un limpiador acompañado de un exfoliante suave o un scrub. Utiliza una base ligera o una crema hidratante con color con ingredientes que combatan el acné, como ácido salicílico o peróxido de benzoilo.
Otra opción segura para la piel propensa al acné es el maquillaje a base de minerales. Evita los productos pesados y a base de aceite que puedan obstruir los poros.
Utiliza un corrector de color para disimular cualquier marca o mancha oscura. Nunca duermas con maquillaje y utiliza un desmaquillante suave antes de acostarte para evitar poros obstruidos y brotes. Asegúrate de limpiar tus brochas de maquillaje regularmente para evitar la acumulación de bacterias que puedan empeorar aún más tu acné.
